La peña 'Los carburos' se convierte en un gran 'fichaje de invierno' para el fútbol minero
El nuevo grupo de aficionados de La Unión Atlético, surgido por iniciativa de Paco Molina y Cristian Expósito, no ha dejado de animar al equipo minero con dos tambores y variados cánticos, fundiéndose con los futbolistas en la celebración del postrero gol del triunfo y en el posterior 'saludo vikingo'.
Daba gusto ver esta mañana el entorno del campo de fútbol Miguel Expósito con unos quinientos espectadores, de los que trescientos habían pasado por taquilla (los menores de 14 años no pagan). La cifra es casi el doble lo habitual, siendo, sin duda, el efecto llamada la gran temporada de La Unión Atlético. Y dentro de ese panorama, un foco de especial resonancia, ubicado en un lateral de la grada.
Ahí es donde estaba lo que en estos tiempo se viene a llamar 'grada de animación', que en realidad es una peña surgida por iniciativa del cantinero del polideportivo, Paco Molina, y del hijo de quien su nombre identifica al campo de fútbol, Cristian Expósito, quienes han conseguido reunir a unas cuarenta personas dispuestas a 'dejarse el alma' por La Unión Atlético desde la grada, estando el cupo de admisión todavía abierto.
El grupo le ha dado mucho colorido y ambiente al partido, no cesando en su ímpetu animador pese a que fueran pasando los minutos y el marcador no se moviese. El entrenador unionista, José Miguel Campos, anhelada antes de este partido tener más afición y más ruido. Pues lo tuvo con la peña unionense 'El carburo', cuyo nombre va en directa relación con el pasado minero de esta tierra.
Ese 'carburo' se ha mantenido encendido en todo momento, con dos tambores y un estupendo coro, con cánticos variados, desde "Yo soy de La Unión, de La Unión, de La Unión..." al 'A por ellos, oé; a por ellos, oé...!", pasando por el "Sí se puede, sí se puede..." y por las clásicas protestas por alguna decisión arbitral o porque el adversario perdía tiempo cuando aún no ganaba La Unión Atlético, pues tras el gol lo que se pedía era con insistencia el final del duelo.
Un cántico nos llamó especialmente la atención, cuya letras, más o menos, viene a ser la siguiente: "La Unión va creciendo y no es casualidad; la gente se pregunta por qué va tan bien; porque somos una familia". Muy significativa, sin duda. Andrés Jiménez Munuera, portero del equipo alevín de la AD La Unión en autonómica, era la voz principal en los cánticos, con un constante acompañamiento del resto de 'carburantes'.
Y llegó el gol. Fabio Conte, el autor, levantó los brazos y, mientras se quitaba la camiseta, corrió hacia donde estaba este grupo. Ahí quedó claro la gran comunión surgida entre futbolistas y peñistas. Se sumó toda la familia blanquiazul, tanto los que estaban jugando como los que se encontraban en el banquillo, quienes cruzaron el terreno de juego. En ese éxtasis quedó sellado el contrato de sentimientos entre ambas partes.
El epílogo fue cuando, tras el final, los jugadores pasaban por el pasillo hacia los vestuarios. Fue una gozada observar 'el saludo vikingo' entre peloteros y animadores envueltos en un marco de fiesta.
Tres jugadores ha fichado La Unión Atlético en 'el mercado de invierno', es como los 'Tres mosqueteros', que no eran tres, sino cuatro. Aquí el cuarto es la peña 'El Carburo', un refuerzo de lujo para cualquier equipo hacia cualquier objetivo.