El concurso del gran festival flamenco viajó a su nacimiento

Escrito por Lydia Martín. Fotos: Antonio Meroño 'Jayam'. 5 de agosto de 2021, jueves.

Fue en octubre de 1961 cuando se estrenó este certamen. Fue dentro de las Fiestas del Rosario y con los aspirantes actuando en la desaparecida terraza del Cine Mery… al aire libre con la luna y las estrellas como techo, como anoche volvió a suceder, aunque ahora en La Maquinista de Levante como marco mientras se recupera el Mercado Público, la sede desde 1978.



💃 Las semifinales arrancaron con una primera gala con cante, baile, guitarra, piano y fagot con un grupo de aspirantes cargados de ilusiones
💃 Antonio Najarro, exdirector del Ballet Nacional, se suma al jurado del concurso de la 60 edición  
 ✅ Las habaneras sonaron en la ‘Avenida del Flamenco’ en la fusión de La Unión con Torrevieja
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Ayer daban comienzo las semifinales del concurso de la 60 edición del Festival Internacional del Cante de las Minas, el eje central del Festival que conecta con el flamenco puro, con el cante, el baile, la guitarra española y otros instrumentos que también tienen mucho que aportar al género.

La gala comenzó por los instrumentistas, subiendo al escenario el piano de Juan Antonio Cortés Martí, de Madrid, que tocó por taranto y alegría; y el fagot de Rubén Jiménez Urbano de Córdoba, ‘Niño Rubén’, por taranta y bulería, acompañado a la guitarra por Luis Ruiz ‘Calderito’, Daniel Morales ‘Mawe’ y Alba Luna a las palmas y Pepe Luis Sánchez a la percusión.

Se fue abriendo paso así al baile, con las cantiñas de Juan Tomás Domínguez, ‘Juan Tomás de La Molía’, de Granada, que estuvo acompañado por Jesús Rodríguez a la guitarra, Manuel Velanina y ‘El Pechuguit’a al cante y Marián Fernández a las palmas.

La primera cita con el cante fue a la voz de Virginia Gámez Gil, desde Málaga, que cantó por malagueña, granaína, granaína y media, tangos, soleá, cartagenera, taranta y acabó con la minera. Volvía tras la cantaora ‘Juan Tomás de la Molía’ al escenario para bailar por taranto.

Desde Sevilla, llegó José León Márquez, que salió con el guitarrista oficial del Festival Antonio Muñoz, para cantar por taranta, mineras, taranto, seguiriya y alegrías.

El semifinalista aspirante a la final y al ‘Bordón’ fue Martín Fayos Limón, ‘Niño Martín’ de Sevilla, que optó por la taranta y la soleá por bulería. Volvía tras él el baile al escenario a cargo de Beatriz Rivero Pardal de Sevilla bailando por taranto, acompañada de Ana Gómez, Manuel Romero y Javier Rivera al cante, y Jesús Rodríguez a la guitarra.

La última actuación de cante fue Nicolás Pelegrín Lario, de Lorca, con malagueña, granaína y granaína y media, cartagenera y taranta. El cierre de la primera gala corrió a cargo de Beatriz Rivero Pardal con una soleá.

NAJARRO, EN EL JURADO
Antonio Najarro se suma al jurado del concurso de la 60 edición del Cante de las Minas, uniéndose así a Pedro Ojesto, Antonio Ayala ‘El Rampa’, José Francisco  Ortega y Francisco Cayuela. “Es una experiencia maravillosa y muy importante para mí por el prestigio que tiene el Festival y los años que lleva, y por las ganas que tengo de ver qué pasa en esos días”, afirmó el bailarín, añadiendo los “grandes compañeros” con los que cuenta en el jurado.

Najarro fue director del Ballet Nacional de España de 2011 a 2019. Se formó con los más prestigiosos maestros de la danza en todos los estilos, como el flamenco, siendo Matrícula de Honor en Danza Española en el Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma de Madrid. Ha estado de jurado en prestigiosos concursos en España, Francia y otros países, como el Certamen Internacional de Coreografía Burgos-Nueva York, el Concurso Nacional de Coreografía de Sevilla, el Certamen Coreográfico de danza española y flamenco de Madrid, el concurso de flamenco de córdoba, además de haber estado de coach y asesor de danza junto a Nacho Duato en el concurso televisivo ‘Prodigios’.

Con él, el jurado lo forman Pedro Ojesto. Empezó en la música a los 19 años componiendo canciones para cine y teatro. Más tardes formó ‘Flamenco Jazz Company’ con el que ha colaborado con grandes músicos y con la mayoría de las estrellas del flamenco como Enrique Morente, José Mercé, Antonio Canales o Joaquín Cortés. Además, ha colaborado como director musical y arreglista con numerosos artistas de la talla de Carlos Cano, Tamara o Francisco. Ha producido discos importantes como ‘La Chanson Flamenca’ y de otros músicos como el Negri, el Yunque, Israel, además de sus propias creaciones.

También está Antonio Ayala, ‘El Rampa’, el cantaor que fue ganador de la ‘Lámpara Minera’ en el año 1989. El cantaor cartagenero también consiguió en 1991 el Melón de Oro del Festival de Cante Flamenco de Lo Ferro. Ayala, considerado como una de las voces más flamencas del cante jondo de la Región, ha llevado su arte hasta ciudades como Londres, Évora, Tel Aviv, Roma o Casablanca. Además, Antonio Ayala ha participado en esta edición como jurado en las pruebas selectivas que han recorrido el país para seleccionar a los semifinalistas.


El flamencólogo José Francisco Ortega Castejón, director de la revista de investigación sobre flamenco ‘La Madrugá’ editada por la Universidad de Murcia, se encuentra también en este jurado. En esta publicación acerca el flamenco desde cualquier perspectiva, firmando artículos sobre flamenco, trovos y cantes de las minas. En la actualidad Ortega es el coordinador del Máster Universitario en Investigación Musical de la Universidad de Murcia.

Completa el jurado Francisco Cayuela, también selector de las pruebas para captar el talento flamenco por toda España en esta edición. El flamencólogo, nacido en La Unión, se inició en el flamenco gracias a su padre, quien además había pertenecido a la comisión organizadora del Festival y había sido miembro del jurado. Cayuela fue jurado por primera vez hace 27 años y desde entonces ha realizado esta labor en más de una decena de ocasiones, tanto de las pruebas selectivas como de las finales.

LAZOS CON TORREVIEJA
La vinculación de La Unión y Torrevieja queda patente en su gran labor para ensalzar su cultura y su arte y darle forma de festival. También en su origen, una historia que tiene su raíz en la extracción, siendo la sal y su comercialización lo que dio importancia a Torrevieja como villa marinera, y la pirita, la galena, la plata o el plomo, entre otros minerales y metales, lo que hizo que La Unión subsistiera durante un largo periodo de tiempo a través de la minería. De sus orígenes queda un legado cultural que pasa por la música.

De Torrevieja nació así el Certamen Internacional de Habaneras y Polifonía, que este año ha recibido el galardón Pencho Cros a la difusión musical, convirtiéndose ayer en protagonista en la Plaza Joaquín Costa. El evento suma ya 67 ediciones, siendo el más antiguo de su género y referente en el panorama coral internacional y funcionando como expresión del municipio, que se convierte en cuna de habaneras a la que acuden coros de todo el mundo para competir por los galardones que el certamen otorga cada año.

Con este premio, el Festival Internacional del Cante de las Minas pone en valor su labor como promotor de un legado cultural y musical, haciendo que los cantos corales perpetúen en el municipio. “No hay palabra más grande que ‘gracias’. Los que sentimos y vivimos nuestra historia y nuestros arraigos sabemos de la valía de este reconocimiento, ya que hacemos esfuerzos tremendos en el mundo de la cultura”, señaló el alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón, que estuvo acompañado por la vicealcaldesa, Rosario Martínez Chazarra, el concejal de Playas y Medio Ambiente, Antonio Vidal, y el secretario del Patronato de Habaneras, Manuel Esteban Viudes.

“Es un orgullo, un reconocimiento que vamos a guardar con la estima que merece. Este es un paso que habéis dado y que hace que ambos municipios estemos más cerca”, añadió Dolón. Por su parte, el presidente de la Fundación Cante de las Minas, Pedro López Milán, quiso recordar el origen de ambos municipios en la extracción y el resultado plasmado en los festivales. “Esos barcos que salían de sal hacia el nuevo mundo y a Cuba traían otros productos como la cultura, que son esos cantes de ida y vuelta”, afirmó. “Los dos hemos tenido esa idea de festival y cada uno representa una forma de ver la vida a través del arte”, concluyó.

Habaneras tradicionales y modernas en la Plaza Joaquín Costa



Tras esta entrega, y gracias a la colaboración del Patronato de Habaneras de Torrevieja, tuvo lugar un concierto a cargo del Grupo Vocal 2x4, compuesto por las sopranos Nuria Maddaloni, Concepción Pérez-Boj y Belén Puente; el tenor Francisco Moreno, el barítono Víctor Alcañiz y Selena Cancino al piano.

En esta muestra hubo tiempo para interpretar habaneras más tradicionales como ‘La paloma’, de Sebastian Yradier, o ‘La dulce habanera’, del compositor de Torrevieja Ricardo Lafuente Aguado; pero también se combinó con composiciones más contemporáneas como ‘Con un beso’, del letrista Antonio Quesada y el músico Aurelio Martínez, ambos del municipio salinero, con un corte más moderno y actual que muestra la vinculación que tiene la habanera con el género de la zarzuela.

Los temas populares ‘Rosita de un verde palmar’ y ‘La bella Lola’ también acercaron las habaneras a la Plaza Joaquín Costa junto a otros cantes que venían del mar y del son y que allí se iban transformando.


* Texto remitido en el que se respeta íntegramente contenido, redacción y ortografía, salvo en el titular y en la entradilla del artículo








 

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