Vedruna Camina...
... por el Valle de Ricote, partiendo desde Ulea y continuando por Ojós, para seguir junto al río Segura hasta Ulea contemplando yacimientos Tardo-romanos, la parroquia de san Bartolomé, la casa Eiffel y, entre otros atractivos, el Gurugú.
COMUNICADO DE ASOCIACIÓN VEDRUNA CAMINA
Este miércoles, nos dirigimos a la vecina población de Ulea, para, partiendo del área de descanso existente antes de entrar en la población, iniciar una subida hacia la casa forestal, para proseguir por la pista que acabada en senda nos lleva a la población de Ojós, pasando antes por por la Pila de la Reina Mora, desde donde se puede ver todo el preciosos Valle de Ricote.
Continuamos acompañados por el río Segura hasta Ulea oeste, en un trayecto que nos permitió contemplar los yacimientos Tardo-romanos, en los cuales estaban efectuando unas excavaciones tras haber tenido lugar una charla de arqueólogos. Seguimos a la noria de Villar Felices, ya en desuso. Una vez allí vemos la parroquia de San Bartolomé y la casa Eiffel, para atravesar todo el pueblo y dirigirnos al 'Gurugú', que nos hace viajar al 'Marruecos del siglo XIX'. Culminamos con una pequeña subida para recoger los coches donde los habíamos dejado.
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PARA SABER MÁS
El Gurugú es un paraje donde se encuentra una torre del mismo nombre, de estilo árabe y recientemente restaurado. Se llama así al paraje de Ulea que está coronado por una pequeña casa de aperos agrícolas, cuyo propietario inicial, Antonio Tomás Sandoval, un militar de Ulea que participó en la batalla de Marruecos, al regresar a su pueblo, lo hizo levantar en 1870 (siglo XIX) a semejanza del existente en el norte de África y utilizado como puesto de vigilancia. Esta pequeña edificación fue restaurada en 2002.
